Comprar un coche de segunda mano puede ser una excelente opción para aquellos que desean ahorrar en la adquisición de su vehículo. Sin embargo, hay que tomar ciertas precauciones para evitar sorpresas desagradables. Para ayudarte a acertar con la compra de tu próximo coche usado, en CarsoL hemos preparado una serie de claves y recomendaciones.
- Lo primero que debes hacer es revisar el exterior del coche. La carrocería puede indicar mucho más de lo que parece: si la pintura presenta un color deslucido, significa que el coche ha estado expuesto al sol; si hay piezas con tonos diferentes, podría tratarse de antiguos golpes; y ampollas en la pintura son signo de principios de corrosión.
- También es importante revisar el motor del vehículo. Si tienes ocasión, extrae la varilla del aceite para verificar su color y presencia de partículas metálicas; comprueba también las correas y los manguitos. Si no tienes acceso a un mecánico, guíate por tu oído: escucha el motor en marcha y aceleración para comprobar que suena bien y sube correctamente de vueltas.
- Los neumáticos también deben ser examinados con detenimiento: sus dimensiones deben coincidir con las indicadas en la tarjeta de inspección técnica; además, el dibujo tiene que tener al menos 1,6 milímetros de profundidad. Los amortiguadores también se deben comprobar empujando el coche hacia abajo para detectar si rebota demasiado (más de dos veces) o si hay holguras excesivas.
- En cuanto al interior del vehículo, fíjate en las zonas donde se colocan las manos habitualmente (volante, palanca del cambio…) para detectar desgastes excesivos para la edad y kilometraje del coche; comprueba los cinturones de seguridad y verifica que los asientos delanteros se regulen y deslicen correctamente. Tira también del botón/llave de contacto para verificar el funcionamiento correcto de los mandos (luces, calefacción, radio…).
- Por último, comprueba los frenos: haz una prueba pulsando durante 20 segundos el pedal del freno para verificar si vuelve a su posición inicial sin problemas; prueba también la dirección soltando el volante durante un instante para comprobar si continúa rectilínea sin holguras ni desviaciones anormales.
Una vez realizada esta exhaustiva revisión mecánica es hora elegir entre comprar a un particular o a un concesionario: ambas opciones ofrecen ventajas e inconvenientes distintos como garantía legal (6 meses vs 1 año), plazos para reclamar problemas (3 vs 6 meses) o precios más bajos/altos respectivamente. En cualquier caso hay que cerciorarse siempre que toda la documentación esté en regla (libro mantenimiento, permiso circulación…).
Si tienes alguna duda, puedes visitar cualquiera de nuestros concesionarios:
Finalmente hay que acordar un precio justo teniendo en cuenta factores como edad/kilometraje/demanda del modelo pero sobre todo reparaciones necesarias comunes com correa distribución (400€), ruedas completas (250€), retrovisor/faro (120€), golpe leve chapa (100€), aceite (50€) etc… Y recuerda firmar siempre el contrato propuesto por Ganvam validado por el Instituto Nacional Consumo o bien aquel propuestopor OCU si es un particular quien vende el vehículo usado.